Anochece y vaya cielo mas azul...

Alucinaciones cósmicas, alucinaciones propias, lluvia de cocaína, felicidad mundial, última oportunidad de ser feliz bien aprovechada, diálogos mudos mejor entendidos que los bien vocalizados, sensación de mandíbula rota; aquel beso fue muy duro terminarlo. Mal sabor de boca tras no tener nada que morder, calles completamente llenas de cuerpos sin visceras, cuerpos desalmados, vacíos...
Lo de siempre, pscicodélicas luces a nuestro entorno, notando como el hielo quema, mirando atentos, sin perder pista, como el subnormal que soy, sopla contra el aire que te despeina, es inútil, soy inútil, pero tu pelo no está alborotado...

Desastroso plan de huida, faltaba tu boca en mi maleta, sigo soplando y termino mareado, te miro sin parpadear hasta que me duelen los ojos, me fumo un par de porros, que ojalá fuese al menos uno, y duermo, o lo intento, y luego el insomnio, y que bonito insomnio abrir medio ojo y verte en el mismo colchón, y que bonita película, ya era hora, pero las horas pasan, tick-tack y arranco el minutero, anochece y vaya cielo mas azul, vaya noche mas amarga, vaya jet lag debo llevar encima...

Entonces huímos, llevo droga de sobra, y en brazos te llevo a ti, aunque tu no eres mas que una droga de diseño hecha para consumir sin prisa, en inyecciones de pecas, en rayas de piernas infinitas o en pipas de agua... 

Y esto es una carta suicida:
Adiós.

...carencia de setas alucinógenas...

Mimos en chivatas de veinticinco gramos, gominolas sabor champán, cursiladas varias, piel de gallina, cuchicheo gritando desde la profundidad de tus bragas hippies con lazos rojos, cuales, pidiendo la paz a mis colmillos con signos indescifrables...

Carta suicida de una uva verde y viscosa, clavícula acentuada, pianos tristes y guitarras cósmicas que llevan a una verdad emocional un tanto agresiva que a su vez me lleva a revivir a Bob Marley para hacerme una transfusión de su sangre. Carencia de setas alucinógenas, exceso de pompas de jabón esnifadas en bañeras llenas de sirope de chocolate negro.

Maldiciones y mentiras, conclusiones yonkies, conclusiones propias, alucinaciones en las que rozo el paraíso, pesadillas deformes en las que me atraganto con tus besos, furtivos mordiscos en el culo, risas orgásmicas que revelan la evidencia, y patadas en la boca a estúpidos lamentos pasados que tatuan en tus labios el pasar de las cosas, atardecer rojo izquierdista, cachondez considerable que lleva a un aumento de pulsaciones y al sexo, por fin me cuelo en un submundo sórdido al que nadie mas accede...

...soy lo in-verso a lo que buscabas...

Me pregunto las veces que no he sabido ser, ahora bien soy contigo. Y por vivir contigo, me suicido por ti, pero muriendo, si es de ti, al infierno de cabeza.

Aunque a treinta y cinco grados, tengo falso frío de verano y aprovecho para resguardar en tu camisita de safari mis intranquilas manos...Cada beso con un inocente mordisco, es como un péndulo que tortura, ya que esos besos llevan al Nirvana, a los delirios toxicómanos y al idílico placer en cualquier zona deshabitada.

Lo recuerdos perturbadores ya casi se olvidan, o este catarsis que dé la vida o nostalgia falsa y fría... Estoy seguro de que el paraíso está en escribir a tinta en su espalda. 

No me deje el micrófono abierto,

ni he soltado a las libélulas luminiscentes de mi estómago, pero me delato escribiendo epitafios hacia ti, 

siempre se escribe hacia alguien, sino, no se escribiría, y yo me juego cada epígrafe por ella.

Ludópata, bibliófilo, esquizofrénico, soy lo inverso a lo que buscabas.

Inspiración poética o sobredosis de café , sea lo que sea, esta es mi última vida de gato enamorado, ya van diez, después de tantas caídas y vidas perdidas o soy inmortal o caigo de pie. 

...Tus piernas, también llamadas el verdadero París...

Ridículos episodios romántico-eróticos de amor barato en lugares cerca de la muchedumbre sorprendida por nuestro insólito comportamiento propio de dos demente enamorados...
Cenicienta de bar, de cerveza o de café, de labios brillantes sin carmín, de momentos sin censura en los que alteras el tiempo... y perdida la noción, de perdidos a tus piernas, también llamadas el verdadero París, yo parisiense...
Cancelamos la cita con el trece, hoy me viene mejor hacerte el amor en cada verso...
Inspiración poética, cunnilingus inesperado o pipa de agua infinita de contrabando... jadeos ilógicos, lógicos de la situación,
ya no soporto el tick-tack... 
este yo, escombro literato, violento verbal, verbalmente histérico de tu fantasmagórico desorden...
Ya conozco los infiernos, hay dos, uno cuando falta la cerveza: que debo ser Irlandés, dichoso néctar de los poetas que se alcoholizan, nunca debí probar su amargura... Ahora, cómico triste sabiendo que, el segundo infierno también me a amarga, hablo de cuando nos separamos...

Hablo de ti...

Desdibujo tu pasado, y sin brújula nos atrevemos a buscar el sucio Edén del que hablan...

A deshora, tarde, parece que con prisa, pero ya que ha llegado, aquí te quedas,

hablo de la suerte, y de quien me la trae,

hablo de ti, hablo de la atmósfera de misteriosa felicidad...

Hablo de la musa de los lunares que mas bien son puntos suspensivos que dejan con incertidumbre a este poeta alcoholizado... títere de esos estelares puntos suspensivos.

Hablo de la mitad de mi vacío que completa la mitad de mi soledad.

Hablo de la realidad reformada para variar la agrisada realidad...

...Y si te vas...

...Y si te fueses

todo ardería,

y mís vérsós,

sé ácéntúáríán pór sólédád...

...Y si te vas,

 todo tan gritos, 

todo tan lágrimas, 

todo tan impar,

 todo tan frágil...

...Y si te vas,

 mil tardes descafeinadas, 

mil sonetos inacabados, 

mil brotes psicóticos en contra del amor.

 Despedazando los candados de los puentes

 Y apagando las luces de París. 

si te vas ya no volveré.

...una olvidada crónica erótica con bohemio resultado...

Fríos amaneceres que tienen de frío lo que un cuerpo sin el tuyo. El reloj ya dejó atrás el ácido del rock and ron barato, el tiempo borró los roll and up como hábito en cada decaída. Intentos estereotipados de recordar una olvidada crónica erótica con bohemio resultado, con la musa de adjetivados versos.

Desvelarse  al lado de la musa que tardaste en encontrar, la musa necesita hacer de la mañana, el mejor momento para rimar. Aromáticos despertares que tienen de aromático lo que el café recientemente hecho.

Entre patos amarillos de goma, de tus pecas, de tus labios aún inertes... a pecar. Y volver a los principios de mis lágrimas de humo, esas amargas lágrimas que de un beso inesperado me secaste, punto y aparte.

Después de tantos cucuruchos de helado de yogur en parques deshabitados para nosotros. Después de tantos cinturones rotos molestos que no dejaban lugar a la libertad de leerte en braille las manchas reconditas de tu cuerpo...

Lunático de hacerle el amor a tus lunares cuando el astro neurótico de cristal que nos aclara las oscuras noches decide postrarse encima de ti. Ya llegó la noche, mi musa me hace poeta, y mis labios ella no puede rechazar. Es hora de poner punto final al día, al verso y al soneto. 

Aquí; Ahora

Y a oscuras

buscando tu boca.

Y en tu otoño

espero nuestro infierno.

Y vivo

deseando morir a tu lado.

Y no duermo

si no es entre tus piernas.

Y versando

prefiero besarte.

Y besándote

jamas te versaré.

Y aunque impertérrito

me asusta tu huída.

Y aunque cuerdo

en tus lunares deliro.

Y muy incrédulo

sigo soñando,

y soñando

con mi vida prosigo.

Y si no es sueño,

a chutarme cafeína

Y cumplir sueños

sí es contigo, 

en vela me paso el invierno.

...Cafeinómana de risa espasmódica...

Fin del verano...Día de lluvia...Cielo agrisado... Pequeños relámpagos luminosos... Donde sea que fuere, su rostro era acromático, desvaído... 

Vergonzosa cenicienta de pantalones ajustados... Estabas a punto de hacerme olvidar el día que lloré cerveza... Después del insomnio de mil noches todo parecía una utopía... Incrédulo...Shisa tras shisa, amargas sonrisas... papeles de ele que me hacía ver luces psicodélicas donde me encerraba...

Ahogándome en pompas de una bong, quemándome los pulmones con un verde descolorido...

Ahora una cafeinómana de risa espasmódica en una rima de labios había reparado las grietas de mi pecho... 

No me imagino ni quiero imaginarme, una tarde de noviembre apunto de estallar la tormenta en la que no te despeine con mis gritos, bajo las gotas sonoras mas tarde, reflejar nuestros coordinados gemidos en el adentro de un huracán de emociones donde tu tez es mas fina y tus pecas mas visibles... 

Sin tu permiso te besé... Ahora ni el aire entre nosotros... 

Sin palomitas, con café... sin amor, con placer... inconsciencia y ondas paralizantes...

Boquiabierto, ojiplático, atónito... etcétera: así me quedé cuando los trozos pisoteados de mi yo, fueron reparados

Piernas de gelatina aunque siguen dándome vértigo... 

Costuras.

Desorden disléxico

en estos mis sonetos.

Costuras

Tú mi costurera

cerrándome la boca,

a mordiscos,

cual cremallera.

Flotar en una dimensión paralela

desconocida

pero paralela

al ver el arte que hace sobre ti

los pijamas y la carita de histeria

cuando muerdo tu culo o,

cuando muerdo tus pecas.

¿Demasiado poeta como para ser jóven o demasiado jóven como para ser poeta?

El JAZZ de tus vertiginosas piernas...

Borrosa mirada de inconsciencia, grato hedor el de tu cuerpo, caos y desorden en tu pelo, nebuloso pensamiento de llegar al mejor punto y final, el único punto y final que tú y yo pondremos, ese punto y final al que llaman orgasmo.

Marea sonaba con sus mejores versos, la carne de gallina ya no solo era por el roze de tu cuerpo desvestido.

Fin de la amargura, comienzo de la difuminada felicidad. Confuso observaba las bonitas hadas que nos rodeaban en tu habitación...

Las miradas incoherentes comenzaron a evanescer dando paso sutilmente a las miradas perdidas, las mías perdidas por ti. Los dos bajo esa nube de tensión hechizante, hipnótica, magnética...

 El arco voltaico rebosante de electricidad que sufría con tus arañazos lo pagaban tus muslos cuales sin saber porque eran mordidos soportaban mis afilados besos...

Cubiertos por las sábanas,gemidos de amplitud decibélica, que en ese momento no nos ensordecía,enfilaba el climax, lo que antes parecían ruidosos discos de teléfonos viejos en mi sien, ahora eran saxofones tocando melodías de la América negra, componiendo en nuestras desabrochadas bocas el jazz de tu vertiginosas piernas.

A día trece o catorce; esperando el quince.

Ya me vas conociendo;

Arranques de paranoias...

Drogado por el placer...

Mi manera de odiar 

Mi talante a la hora de desabrochar mi boca...

Ya sabes;

Maniático por tus piernas...

Amar la lírica,

La de tus bragas entre mis dientes.

La de agarrar tu cintura por la que imprudente me encapricho...

Un cortado por favor...

¡Despertad!, soy un afortunado

A día trece o catorce

En una vida de injusto azar...

Sistemas gravitatorios llenos de musas en mi entorno...

Atontado en la orilla de su boca, en sus labios; mi perdida mirada...

Dama de día gran dama de noche...

En mis versos se nota la decepción de mi musa

Su disgusto,

Huele a musa defraudada

Se percibe, encerrada en esta estrofa

No saldrás de mis palabras,

ni de mi cabeza

Un cortado por favor...

¡Despertad!, soy un afortunado

Te dedico mis insomnios...

Te dedico este baile de los días felices de mi vida

Y ahora ando flotando 

 ahora floto...

Mía en mi, mia.

Mi corazón desbocado, tu boca descorazonada.

 Inocente se declaró la muerte,

 aunque ahora bailamos con ella.

 Ella,

 aunque tu conmigo.

Vistiéndome con prisa para no vestirme nunca.

Mía en mi, 

mía.

No soy posesivo ni te poseo, 

pero poseído por ti muero.

Perderé la boca entre tus dientes,

pero tu por mi,

musa,

perderás la ropa y los trenes.

Mía en mi,

 mía.

Por nuestro...

Por frío,

nuestro frío. 

Por ser nuestro,

dulce infierno.

Nuestro,

por tuyo.

Por mío,

nuestro.

Tibias nuestras ganas,

como dejamos la sábanas.

Por ser nuestro,

dulce infierno.

Mi, 

por ti.

Karma,

nos lo debes.

Acompañado de tu soledad.

Y estar

por ti, bien perdido.

Para ti, por ti,

solo por ti,

contigo,

como nadie lo ha estado.

Y estar

Descansando en tu pecho.

En la esquina del cuarto banco de tu cabeza,

Feliz o de pena...

Caótico por tu presencia,

solo, 

tu sola.

 Acompañados de la soledad contraria.

Y vodka a nuestros hígados.

Y tus pesadillas a mi piel.

Y tus muslos con las llaves de mi cárcel.

Y tu silencio por encima de mis gritos...

A falta de ti, seguiría sin mi...

Oxidado corazón está siendo reparado,

 con tu gloss en mi cuello y tu culo amarrado.

Tú eres contigo,

 como yo sin ti.

 A falta de cerveza fría en el mes de Abril.

 A falta de ti,

 seguiría sin mi.

La goma de tus bragas...

Anhelo el olor de tu cuello...

Añoro el desorden de tu pelo...

Cabeza amueblada, 

alquilo tus besos...

Sexo y diversión... Tú eres más que eso...

Esposados de por vida... ¡Hasta en sueños!

Tus piernas, tu cintura...

Mis gemidos y locura...

Marioneta controlada por las pecas de tu pecho...

Mansión,

 colocón,

 puta droga,

 eres perfección.